Nace en Bejucal, provincia de La Habana el 17 de abril de
1938.
Cursa el Bachillerato en Ciencias en el Instituto de la
Víbora de La Habana, donde participa en
manifestaciones contra la dictadura de Fulgencio Batista.
Estudia Medicina en la Universidad de La Habana durante
tres años hasta su arresto en febrero de 1961 por conspirar contra la tiranía
de Fidel Castro.
En el juicio celebrado durante su ausencia de la
Universidad es enterrada simbólicamente y su expediente quemado.
Cumple 19 años de prisión política en Cuba en cárceles de
distintas provincias :en la Cárcel de Mujeres de Guanajay en la provincia de
Pinar del Rio; en la Cárcel de Guanabacoa y en La Cabaña en la provincia de La Habana , y
en la más infame: la Cárcel de Baracoa en la provincia de Oriente.
Sale de Cuba después de 19 años y unos meses de la cárcel
política hacia Costa Rica, en protesta por el dialogo entre
Carter y el gobierno, castrista ,por no
haber sido consultado al respecto el presidio político cubano.
Posteriormente en Miami escribe Diario de un Sobreviviente,
que mas tarde traduce al inglés Glenn Garvin, reportero del Miami Herald , con
el título en inglés de Diary of a Survivor: Nineteen years in a Cuban
Women’s Prison”.
Viaja a Santo Domingo donde completa la carrera de
Medicina. Regresa a Estados Unidos y aprueba los exámenes requeridos en este
país para más tarde hacer la “residencia”: el entrenamiento en un hospital
docente. La “mano larga “de Fidel Castro la alcanza una vez más. El argumento
utilizado por un agrimensor dominicano, graduado en la Unión Soviética, Ahmed Hazam
Marte Durán- encargado de revisar los expedientes-aducía que ella nunca podría ser médico en una
sociedad de consumo porque “se había atrevido a luchar contra el hombre más
grande de América”. Durante los siguientes 9 años, el Ministerio
de Educación de Santo Domingo se negó a revisar el expediente de Ana Lázara Rodríguez y cuando finalmente ella
logra la revisión del mismo y recibe el título y el comprobante de sus estudios, ya era muy
tarde para cumplir con el requisito de
edad para ingresar como médico “residente’ en ningún hospital norteamericano.
Trabajó como
flebotomista en el Jackson Memorial Hospital de la ciudad de Miami por 9 años y después como
Instructora en Little Havana Activities and Nutrition Center por 15 años.
Diario de un
Sobreviviente es un vívido documento revelador de las crueles vivencias
sufridas por la Dra. Rodríguez en
el presidio político femenino y resulta imprescindible
su permanencia en la memoria histórica del pueblo cubano y de la humanidad para que no vuelva a repetirse tanta
injusticia.